El pescado a la parrilla fue una delicia que me hizo sentir en el paraíso culinario. La habitación era espaciosa y contaba con unas vistas al agua que te dejaban sin aliento. Además, la atención de Jorge fue muy amable y siempre dispuesto a ayudar.

Aunque nos pidieron un depósito en efectivo de 50 euros sin previo aviso y el check-out era un poco adelantado, eso no opacó la belleza del lugar. La privacidad era algo limitada ya que la terraza se compartía con los dueños, pero la experiencia general siguió brillando.

Además, la atención de Verónica fue muy incómoda, llamando a la puerta sin aviso. Me esperaba un tratamiento especial, tal vez una mejora de habitación o un detalle amable, pero claro, aquí no hay tal cosa. Debería haber escrito una buena reseña, pero no pude.

1 Atención excepcional
2 Tranquilidad absoluta
3 Vista increíble

1 Camino complicado
2 Falta de café

La tranquilidad del lugar y las vistas impresionantes de las estrellas desde el jardín son simplemente espectaculares, perfectas para una desconexión total.

El camino de acceso al lugar es un poco complicado, especialmente si llegas de noche, así que asegúrate de tener cuidado al conducir.

Impecablemente limpio y atención super amable con un ambiente familiar y acogedor.

el wifi es rapído y el baño grande, pero no hay café por la mañana.

El lugar es tranquilo, perfecto para relajarte. además, se puede ver una tormenta de estrellas preciosa desde el jardín.

Me sentí muy a gusto, no tengo ninguna pega.

Recomiendo para gente que busca tranquilidad

La verdad es que la hospitalidad de los anfitriones fue excepcional, como estar en casa con familia, siempre atentos y dispuestos a ayudar. Me encantó poder disfrutar de los atardeceres desde el jardín, viendo cómo el cielo se llenaba de estrellas cada noche.

No fue barato, pero valió la pena.

una experiencia increíble en un lugar oculto donde la hospitalidad de los anfitriones te hace sentir como en casa y las vistas son pura magia

La estancia en Winter Wonderland Villa fue realmente increíble. Desde el momento en que llegué, Verónica y Damien me hicieron sentir como parte de su familia, lo que es raro y hermoso. La habitación era espaciosa y tenía todo lo necesario, incluyendo un baño impresionante. La tranquilidad de este lugar es lo que más me encantó, perfecto para desconectar y disfrutar de la naturaleza. Las estrellas se ven de manera espectacular desde el jardín, y tener el coche facilita la exploración de hermosos paisajes. Definitivamente volveré.

La habitación tenía unas vistas espectaculares y estaba decorada con mucho gusto. El lugar es tranquilo y perfecto para relajarse.

No llegué a encontrar una chica española para hacer la cama. ¡quizás para la próxima vez!

Me encantó la terraza fantástica y las vistas al agua. Es un lugar muy tranquilo, pero el camino hasta allí es un poco complicado. ¡Aún así, volveré seguro! 😊